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Pieter brueghel el viejo museo del prado
La masacre de los inocentes
El vino del día de San Martín (temple encolado sobre lino, 148 x 270,5 cm, ca.1565-1568) es una obra hasta ahora desconocida de Pieter Bruegel el Viejo, figura clave dentro de la pintura flamenca del siglo XVI. Ha sido atribuida al artista por el Museo del Prado tras varios meses de estudio y la restauración del cuadro en el Museo. El Museo cuenta ahora con una ventajosa opción de compra del cuadro y se beneficia del apoyo que suponen los informes favorables emitidos por la Comisión Permanente del Real Patronato y el Comité de Licencias de Exportación, además del apoyo expresado hoy por el Ministro.
La reaparición de este cuadro puede considerarse un gran descubrimiento para la historia del arte. Pieter Bruegel el Viejo, el “nuevo Bosco”, como se le conocía en su época, es la figura más importante de la pintura flamenca del siglo XVI. Célebre en vida, tras su temprana muerte en 1569 su escasa producción (de la que sólo se conservan obras ejecutadas en la década de 1557 a 1568) fue perseguida obsesivamente por los coleccionistas.
Pinturas 1600-1810 en el museo pushkin de moscú rusia
Hace unos años, el director del Museo del Prado, Miguel Zugaza, visitaba la colección de pinturas de la familia Medinaceli, una antigua familia aristocrática española. De repente, descubrió este cuadro, el Vino en el día de San Martín.
Al restaurar el cuadro, resultó ser una de las pinturas más grandes de Pieter Breughel den Ouden, de unos 2,4 por 1,5 metros. Se cree que está realizado en los últimos años del pintor, entre 1565 y 1568, y en él aparecen unas 96 personas que muestran claramente sus emociones mientras San Martín regala una parte de su capa.
Pieter bruegel el viejo – los siete pecados capitales – la lujuria
Con motivo de la subasta de obras de Pieter Brueghel el Joven y Jan Brueghel el Viejo en Londres, el especialista en cuadros de los Antiguos Maestros Alexis Ashot explora el árbol genealógico más enmarañado de la historia del arte a lo largo de casi 200 años
Para mucha gente, los cuadros de los Maestros Antiguos evocan una escena de la vida campesina de Brueghel, muy probablemente sin darse cuenta de que hay una diferencia entre hijo, hermano, siglo e incluso ortografía. La realidad es que los Brueghel formaron una dinastía, una compleja familia de artistas que abarcó casi 200 años, desde 1525, innovando pero también revisando la obra de las generaciones anteriores para crear una “marca” Brueghel perdurable.
Las conocidas escenas nevadas y las imágenes bíblicas o clásicas a menudo transmiten múltiples significados, revelando la complejidad de la vida en los Países Bajos (la actual Bélgica y Holanda) en los siglos XVI y XVII, cuando el gobierno del Imperio católico de los Habsburgo chocaba con los cismas de la Reforma protestante.
La visión de esta dinastía de artistas es tan vívida y reconocible que, a lo largo de los años, han influido en artistas como Peter Doig o Jeff Koons, y han inspirado a todo el mundo, desde el director de cine ruso Andrei Tarkovsky y los poetas W. H. Auden y William Carlos Williams hasta David Bowie.
Pieter brueghel el joven, los aduladores, c 1592
Con motivo de la subasta de obras de Pieter Brueghel el Joven y Jan Brueghel el Viejo en Londres, el especialista en cuadros de los Antiguos Maestros Alexis Ashot explora el árbol genealógico más enmarañado de la historia del arte a lo largo de casi 200 años
Para mucha gente, los cuadros de los Maestros Antiguos evocan una escena de la vida campesina de Brueghel, muy probablemente sin darse cuenta de que hay una diferencia entre hijo, hermano, siglo e incluso ortografía. La realidad es que los Brueghel formaron una dinastía, una compleja familia de artistas que abarcó casi 200 años, desde 1525, innovando pero también revisando la obra de las generaciones anteriores para crear una “marca” Brueghel perdurable.
Las conocidas escenas nevadas y las imágenes bíblicas o clásicas a menudo transmiten múltiples significados, revelando la complejidad de la vida en los Países Bajos (la actual Bélgica y Holanda) en los siglos XVI y XVII, cuando el dominio del Imperio católico de los Habsburgo chocaba con los cismas de la Reforma protestante.
La visión de esta dinastía de artistas es tan vívida y reconocible que, a lo largo de los años, han influido en artistas como Peter Doig o Jeff Koons, y han inspirado a todo el mundo, desde el director de cine ruso Andrei Tarkovsky y los poetas W. H. Auden y William Carlos Williams hasta David Bowie.
